El retiro de Ennio Morricone, una crónica de poderosas melodías | Cine O\’culto
Cómo olvidar aquel grandioso momento de Kill Vill vol. 2 en el que Beatrix Kiddo (Uma Thurman) es enterrada viva por el detestable Budd (Michael Madsen), quien antes de encerrarla en el ataúd le dice: “esto es por romperle el corazón a mi hermano”.
Una vez dentro, “la novia”, atrapada sin posible escapatoria, recuerda su entrenamiento con Pai Mei y la técnica de atravesar un trozo de madera con el puño a menos de cinco centímetros de distancia para escapar de la caja que la aprisiona, un momento de gran ansiedad que es musicalizado por una pieza instrumental, de esas que transportan a una lejana montaña donde se suscita un combate de Kung Fu al amanecer. Por supuesto hablamos de L’ Arena, del director de orquesta romano de 90 años de edad, Ennio Morricone, conocido por haber compuesto alrededor de 500 bandas sonoras, tanto para películas como para series. Su emblema, crear piezas a partir de cualquier sentimiento asemejado a la melancolía y la nostalgia.
Pese a siempre ser esquivo de la prensa, a finales de 2018
concedió una entrevista a Playboy, pero algunas de sus palabras fueron
tergiversadas y le adjudicaron la afirmación de que Quentin Tarantino es un
cretino. Morricone lo negó y la revista se vio obligada a retractarse.
Apenas iniciado 2019, el compositor vuelve a dar nota, ya que luego de más de cinco décadas de trayectoria, anunció una gira de despedida por 10 países europeos: Alemania, Polonia, Dinamarca, Hungría, República Checa, Suecia, Noruega, Bélgica, Irlanda y su natal Italia, donde realizará un total de ocho presentaciones, dos en la ciudad de Verona y seis en Roma. De tal modo que colgará la batuta el 22 de junio al frente de una orquesta de 200 músicos.
La música de Morricone forma parte de más de 20 películas galardonadas, así como de piezas sinfónicas y corales. Sus trabajos más notables se encuentran en el spaghetti western La muerte tenía un precio (1965), El bueno, el malo y el feo (1966) y Hasta que llegó su hora (1968); bandas sonoras que compuso junto con su colega Sergio Leone.
A lo largo de su prolífica carrera, logró trascender el nicho de amantes del cine, ya que varias de sus obras forman parte de la cultura popular. Por mencionar un ejemplo, Metallica ha utilizado durante décadas The ecstasy of gold como introducción a sus conciertos. También, su obra se extiende a varios géneros de composición, lo cual lo convierte en uno de los compositores más versátiles de cine y de los más influyentes del siglo XX.
Suele mencionar a Bach, Vivaldi y Mozart como
sus ídolos, además de su maestro Goffredo Petrassi, a quien le gusta dedicar
sus creaciones.
Tan grande como peculiar, se considera un hombre de izquierda pero “no un comunista” y nunca ha tenido un piano en su estudio: afirma que “escucha” en su cabeza la música que compone.
No se mudó a Hollywood y jamás se molestó en aprender inglés. Aun así, pudo trabajar perfectamente con directores como John Carpenter, Brian De Palma, Barry Levinson, Oliver Stone, Warren Beatty, Terrence Malick o Roland Joffé.
Estuvo nominado al Óscar por Días de gloria (1978), La
misión (1986), Los intocables (1987) y Bugsy (1991), pero consiguió la
estatuilla hasta 2016, a los 87 años, por The hateful eight (2015), sin
contar el Óscar honorífico que recibió en 2007.
Tan sólo en 1968 hizo la música de alrededor de 20
largometrajes, época en la que incluyó en sus partituras sonidos inéditos hasta
entonces en la música de cine: silbidos, disparos, campaneos y hasta gritos,
prácticas que revolucionaron el género western. En 1961 hizo su primera banda
sonora para El federal, una tragicomedia ambientada en la Segunda Guerra
Mundial.
En 1956 se casó con María Travia, que a la fecha siguen juntos y han compuesto varias obras. Morricone siempre le dedica los premios que recibe a su esposa. Tienen cuatro hijos (uno compositor y otro director). Por aquellos años también alternaba su trabajo de trompetista en bares con la composición de música para programas de la RAI (compañía de radiodifusión pública de Italia) y logró colaborar con artistas de la época como Paul Anka y Rita Pavone.
A los 16 años tocaba con varias orquestas en hoteles romanos;
a los 12 ingresó al conservatorio de música y desde los seis ya componía sus
propias piezas.
Sin tener falsa modestia, a Enio Morricone le gusta que se refieran a él como “maestro” y que se reconozca toda su obra. Al colgar la batuta, genera un profundo vacío que apenas se compensa con el tremendo legado que deja en el cine y la industria musical.
Premios Oscar:
2007 Oscar honorífico
2016 Mejor Banda Sonora, The Hateful Eight
Premios Globos de oro:
1987 Mejor Banda Sonora, La Misión
2000 Mejor Banda Sonora, La leyenda del pianista en el océano
2016 Mejor Banda Sonor,a The Hateful Eight
Premios BAFTA:
1980 Mejor música de película, Días de gloria
1985 Mejor música original, Érase una vez en América
1987 Mejor música original, La Misión
1988 Mejor música original, Los intocables
1991 Mejor música original, Cinema Paradiso
2016 Mejor música original The Hateful Eight
Premios Grammy:
1988 Mejor Banda Sonora, Los intocables
2014 Grammy Trustees Award a la trayectoria musical
Premios David de Donatello:
1988 Mejor Banda Sonora Gli occhiali d’oro
1989 Mejor Banda Sonora Cinema Paradiso
1991 Mejor Banda Sonora Stanno tutti bene
1993 Mejor Banda Sonora Jona che visse nella balena
1999 Mejor Banda Sonora La leyenda del pianista en el océano
2000 Mejor Banda Sonora Canone inverso
2006 Mejor Banda Sonora 50 aniversario del David de Donatello
2007 Mejor Banda Sonora La desconocida
2010 Mejor Banda Sonora Baarìa Ganador
2013 Mejor Banda Sonora La mejor oferta
Premios Nastro d’argento:
1965 Mejor Banda Sonora Por un puñado de dólares
1970 Mejor Banda Sonora Metti, una sera a cena
1972 Mejor Banda Sonora Sacco y Vanzetti (película)
1985 Mejor Banda Sonora Érase una vez en América
1988 Mejor Banda Sonora Los intocables
1999 Mejor Banda Sonora La leyenda del pianista en el océano
2000 Mejor Banda Sonora Canone inverso
2001 Mejor Banda Sonora Malèna
2007 Mejor Banda Sonora La desconocida
2010 Mejor Banda Sonora Baarìa Ganador
2013 Mejor Banda Sonora La mejor oferta
1969: Spoleto
premio Cine
1972: Premio
Internacional de Cine de Cork por La
Califa
1981: Premio de la
Crítica para el registro por The
Lawn
1988: Silver Ribbon de
la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión,
por Los intocables de Eliot Ness
1989: Nintendo Ganador
As anual por El día anterior
1989: Leopardo de
Honor de Festival Internacional de Cine de Locarno
1990: Gran Premio de la Fundación Sacem XLIII Festival de Cannes por Cinema Paradiso
1992: Grolle de Oro por
su carrera (San Vicente)
Efebo de Plata por Jona che visse nella balena
1994: Golden Soundtrack
Premio dell’ASCAP (Los Angeles)
1995: León de Oro
por toda su carrera en el Festival Internacional de Cine de Venecia
1996: Premio Ciudad de
Roma para la poesía
2008: Orden al
Mérito Artístico y Cultural Pablo Neruda
2008: Premio
Internacional de Daniele Paris (Frosinone)
2008: Carrera de Saturno
en el Festival Internacional de Cine de Oro Alatri
2009: Premio a la
Trayectoria de la Región Autónoma del Valle de Aosta entregados durante el
festival regional Musicastelle.
2009: Premio de la
Fundación Italia-Estados Unidos.
2010: una corona de
laurel honorífico Europclub la región de Sicilia Provincia de Mesina.
2010: Polar Music
Prize, Estocolmo.
2016: Óscar a la
mejor banda sonora
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Cómo olvidar aquel grandioso momento de Kill Vill vol. 2 en el que Beatrix Kiddo (Uma Thurman) es enterrada viva por el detestable Budd (Michael Madsen), quien antes de encerrarla en el ataúd le dice: “esto es por romperle el corazón a mi hermano”. Una vez dentro, “la novia”, atrapada sin posible escapatoria, recuerda su…
Cómo olvidar aquel grandioso momento de Kill Vill vol. 2 en el que Beatrix Kiddo (Uma Thurman) es enterrada viva por el detestable Budd (Michael Madsen), quien antes de encerrarla en el ataúd le dice: “esto es por romperle el corazón a mi hermano”. Una vez dentro, “la novia”, atrapada sin posible escapatoria, recuerda su…